Desde su independencia en 1990 y especialmente después de la Guerra de Transnistria en 1992, la región recibe el nombre de República Moldava de Pridnestroviana (RMP), un Estado no reconocido que reclama el territorio al este del río Dniéster, la ciudad de Bender y sus localidades circundantes ubicadas en la orilla oeste. La República de Moldavia no reconoce la secesión y considera que los territorios controlados por la RMP son parte de la región autónoma moldava de Stînga Nistrului, oficialmente denominada unidad territorial autónoma con un estatus jurídico especial. Aunque la República Moldava Pridnestroviana (RMP) no es internacionalmente reconocida, en efecto es un Estado independiente, organizado como una República presidencial, con su propio Gobierno, Parlamento y su presidente Yevgeny Shevchuk.

La también conocida por Transnistria es a veces comparada con otras zonas de conflicto congeladas postsoviéticas como Nagorno-Karabaj, Abjasia y Osetia del Sur. Los dos últimos han reconocido a la República Moldava de Pridnestroviana (RMP), Transnistria, como un Estado independiente y han establecido relaciones diplomáticas con ella a cambio de su reconocimiento a través de la Comunidad para Democracia y los Derechos de las Naciones.